Fin (?)

Cuando algo acaba te preguntas cómo empezó, es instintivo.
Pero no sólo eso, también deberías preguntarte qué has hecho mal para que haya acabado.

No cesa

¿Tienes idea de lo que duele desear algo con todo tu corazón, con todas tus fuerzas, con todo tu alma, y saber que no vas a poder tenerlo nunca?

Es una tortura continua y constante, viendo como el mundo sonríe y tú tienes que hacer lo mismo para no desentonar, mientras te estás muriendo por dentro.

Eso sí, nunca mueres; la situación te lleva al límite, pero te deja ahí, sufriendo, sin matarte.

Una tortura que nunca cesa.

Me pregunto si algún día se obrará el milagro, quién sabe.

Esta sí

Lleva a sus espaldas innumerables escaramuzas. Como si de un campo de entrenamiento de tratara, y siempre consigue lo que se propone.

Pero por primera vez entra en combate, la acción le llama. Todos le animan y le instan a hacerlo como ha hecho en otras ocasiones, como hace siempre.
Él no cree esas palabras, el miedo le bloquea, el miedo le paraliza. No cree estar a la altura.
Piensa y desea haber podido entrar en más ocasiones en batalla, pero quizá sea mejor así.

Ya se despide, ojalá salga todo bien.

Karma

Dicen que no hay que ser una mala persona, ni hacer cosas malas, ni tan si quiera desearlas, porque luego vendrá el karma y te lo devolverá.

El otro día le advirtieron que si seguía así, el karma se lo devolvería, que por pequeñas cosas como las que estaba haciendo el karma se las devolvería.

Ella no respondió, simplemente se dio la vuelta y se marchó. Por dentro pensaba que ya nada peor le podía hacer el karma, ni el karma, ni nada ni nadie.

Duele

Cuando algo termina y poco a poco va pasando el tiempo, comprendes que nada volverá a ser como antes. Duele darse cuenta, pero es así.

Sin embargo, lo más doloroso viene cuando te das cuenta de que ya no están los pequeños detalles que no parecían tan importantes.
Te das cuenta de que es la suma de esos pequeños detalles lo que te daba la vida y hoy te la quita.

No supe

Ayer me llamó llorando. No eran las lágrimas de siempre, eran lágrimas de desesperación.
Cuando al fin consiguió articular palabra, me dijo que no era capaz de mantener a nadie a su lado, que destroza todo lo bueno que le ocurre, que echa a todo aquel que trata de ser bueno con ella.

¿Sabes lo más triste?
Que no supe cómo tranquilizarla, qué decirle para que dejase de llorar.

Gracias

Mil gracias por haberme enseñado que una simple palabra cariñosa puede hacer feliz a alguien, y que su ausencia puede ahuyentar a esa felicidad en cuestión de segundos

Plomo

Sabíamos que esto llegaría algún día. Confiaba en nuestra suerte, en la tuya, en la mía, pero hacia tiempo que retrasábamos inevitable.

Sin embargo, había muchas maneras de hacerlo. Traté de ser respetuoso, pensando en ti antes que en mí incluso cuando no lo merecías.

No cabe duda: ni lo merecías ni lo mereces. Una tras otra, todo son decepciones, todo; que si lo uno, que si lo otro, que si lo de más allá.

Lo normal es que volvieras, pidiendo perdón y con la esperanza de que todo se arreglase. Pero esta vez no, esta vez resulta ser diferente, esta vez tu orgullo vale más que cualquier otra cosa.

Ni si quiera sé por qué escribo esto. Antes tenía con quien desahogarme, ahora le escribo a una pared en blanco que no responde y solo provoca confusión y dolor.

Ni si quiera sé qué hago perdiendo el tiempo escribiendo algo que a nadie le importa y nadie leerá, pero duele cuando haces todo por algo o alguien, y te devuelve plomo en vez de plata.

Volver a empezar

Una de las cosas malas que ocurren cuando algo termina, es el inevitable pensamiento de que, si algún día algo consigue sustituirlo, hay que empezar de cero.

Es como quien corre una maratón. Si a los 30 kilómetros le dicen que tiene que retroceder hasta la salida, para luego volver a hacer los 42 kilómetros.. Se le caerá el alma a los pies, como es lógico.

Es uno de los efectos negativos porque no se puede evitar pensar en ello, es más, a veces puede resultar más sencillo seguir corriendo aunque no sirva de nada, porque al resto no le servirá, pero sí al corredor que ha logrado terminarla.

Hoy

Al fin ha conseguido volver a dormir tranquila.
Hacía tiempo que no contaba ovejitas, ni que dejaba sonar el despertador, ni que conseguía descansar.
Algo ha cambiado, y lo agradece.
Antes contaba los días que pasaban sin que consiguiera descansar, ahora se levanta feliz, contenta y alegre, porque está volviendo a recuperar algo que había perdido hace mucho tiempo.
Ni si quiera recordaba lo que se sentía al levantarse así.
Hoy, vuelve a sonreír.

A la mañana

Al despertarte entiendes que mierda sigue ahí la misma mierda de ayer, pero también entiendes que por mucho que lo intentes cambiar, hay tantos frentes abiertos que es imposible encontrar solución.

Sólo te queda sonreír, intentar ser fuerte, y conseguirlo antes de quedarte atrás.

Todavía quedan algunas cosas que quizá puedan hacerte feliz, así que lucha por ellas.

De la noche

Están los días malos y luego está hoy.

Iba a decir que ha sido uno de esos días en los que todo sale al revés, en los que en cada uno de los aspectos de tu vida, algo ha ido mal, bastante mal, pero no, no hay días como esos, hoy ha sido excepcional.

Ni si quiera sé qué hago escribiendo, debería irme a intentar descansar, dormir algo y rezar para que mañana al despertar todo sea diferente.

Ojalá sea así.

El de al lado

¿Conoces esa sensación de no encajar en ningún sitio? Cuando por bueno que intentas ser, a nadie le caes bien, nadie te quiere a su lado, a nadie le importas.

Es triste.. quizá quien menos te esperas también está así.

Ya está hecho

Ei, ya está hecho. No pasa nada, el pasado pasado está, no hay por qué hablar de ello. No tiene sentido que te avergüences si te arrepientes, no tiene sentido que te eches la culpa, no hay culpables
Lo único que importa ahora es la sonrisa que pondrás mañana, así que ve pensando en el motivo